ETF de Bitcoin japonés podría lanzarse en 2027, dice ejecutivo de KPMG

Los inversores de criptomonedas en Japón podrían enfrentarse a una espera más larga de lo esperado para un ETF de Bitcoin doméstico. Un ejecutivo de KPMG Japón sugiere que la aprobación más temprana podría llegar en la primavera de 2027. Aunque el concepto de un ETF de Bitcoin japonés se ha discutido durante años, los obstáculos regulatorios y la cautela política están ralentizando el progreso.

Barreras regulatorias para la aprobación de un ETF

Kenji Hoki, jefe de la división web3 y fintech de KPMG Japón, señaló en la cumbre WebX2025 en Tokio que aprobar un ETF en Japón es complicado bajo las leyes actuales. La Ley de Fondos de Inversión limita los activos que los fondos de inversión nacionales pueden poseer, por lo que los fondos no pueden comprar directamente criptoactivos como Bitcoin.

Hoki también destacó que las normas de supervisión complican aún más las cosas. Incluso si los responsables de políticas están interesados, el progreso ha sido lento porque la industria financiera no ha alcanzado un consenso. Los reguladores han sido cautelosos ante la falta de apoyo generalizado.

El proceso sigue el calendario legislativo habitual de Japón. Las solicitudes de reforma fiscal se realizan a comienzos de año. Si se presenta una solicitud de ETF de Bitcoin a principios de 2026, los legisladores podrían revisarla en marzo o abril, lo que empujaría la implementación a la primavera de 2027 como fecha más temprana. Hoki indicó que el gobierno podría acelerar el proceso cambiando las normas de supervisión si existe voluntad política.

Japón se queda atrás respecto a tendencias globales

Mientras Japón debate su posición, otras regiones avanzan. Ya se han invertido miles de millones en ETFs de Bitcoin al contado en EE. UU., transformando las carteras institucionales de cripto. Hong Kong y Singapur también facilitan cada vez más el acceso de los inversores a los activos digitales.

Tomoya Asakura, CEO de SBI Global Asset Management, advirtió que un lanzamiento en 2027 podría llegar demasiado tarde. Los ETFs de Bitcoin al contado en EE. UU. atrajeron más de $15 mil millones en apenas unos meses, mostrando la rapidez con que otros mercados están avanzando.

Japón ha declarado que quiere usar cripto para fomentar la acumulación de riqueza entre sus ciudadanos, pero la implementación está rezagada. Si las aprobaciones tardan otros dos años, los inversores japoneses podrían quedar en desventaja. Una opción que sugieren los expertos es dar acceso a los inversores japoneses a ETFs listados en EE. UU. a través de fondos de inversión locales, si se actualizan las normas.

Creciente interés entre los inversores japoneses

El interés por las criptomonedas entre los inversores japoneses sigue creciendo, incluso con los retrasos regulatorios. Hajime Ikeda, de Nomura Holdings, destacó una encuesta que muestra que más del 60 % de los inversores japoneses desean exponerse a cripto. Este nivel de demanda podría impulsar a los reguladores a actuar más rápido para atender la presión de los mercados institucionales y minoristas.

Las autoridades empiezan a responder a estos cambios. El ministro de Finanzas, Katsunobu Kato, sugirió que los activos digitales podrían ayudar a diversificar el panorama de inversión en Tokio, aunque advirtió que la volatilidad y la gestión cuidadosa del riesgo siguen siendo esenciales antes de una adopción más amplia.

Esta situación genera un delicado equilibrio. Los reguladores quieren mantener la estabilidad del mercado, pero podrían frustrar a los inversores que ven oportunidades captadas en otros lugares. Así, crece la impaciencia entre los traders minoristas que buscan vías más claras para acceder a Bitcoin regulado.

Qué significa esto

El camino hacia un ETF de Bitcoin japonés no es fácil ni rápido. Si el plan actual se mantiene, 2027 es la fecha probable de lanzamiento. Pero con los mercados globales avanzando rápidamente, Japón enfrenta presión para actuar antes. Los responsables de políticas deben elegir entre un enfoque cuidadoso y gradual o cambios más rápidos que podrían llevar los ETFs al mercado antes.

La espera puede resultar frustrante para los inversores, pero refleja el estilo financiero de Japón, que es cauteloso, deliberado y consciente del riesgo. Los resultados de esta estrategia se verán claros en los próximos años.